La instalación correcta de una caldera de condensación es esencial para la seguridad y bienestar de cualquier hogar, ya que permite satisfacer muchas necesidades en el día a día en casa, ya sea para usarlo de forma sanitaria o como calefacción. Y que elementos como la inclinación del tubo de caldera de condensación estén bien instalados.
Es conveniente que sepamos todo lo necesario sobre las salidas de humos que tienen las calderas de condensación para quedarnos tranquilos o tomar medidas para cambiar la instalación si comprobamos que no está realizada de forma correcta.
¿Cuál es la importancia de la inclinación del tubo de la caldera?
El sistema interno de una caldera de condensación ayuda a recuperar, antes de expulsar los gases de la combustión fuera del hogar, una parte importante del calor que está presente en los humos salidos de la combustión. La recuperación de la energía enfría bastante la temperatura de estos gases bajándolos por debajo de los 50ºC y provocando que los veamos en forma de vapor.
De esta forma, las calderas de condensación echan vapor los conductos que, al entrar en contacto con la temperatura ambiente exterior, parte de este humo blanco se transforma en líquido.
Por eso, los tubos de los conductos de la caldera han de estar instalados con cierta pendiente ascendente desde la caldera hacia el exterior del hogar, para que los condensados creados puedan mantenerse en la caldera y estar adecuadamente conectados a un desagüe.
¿Qué ángulo de inclinación se recomienda para la salida de humos?
Para evitar que la caldera de condensación expulse agua por la salida de humos, las marcas y fabricantes estiman un grado mínimo de pendiente hacia la caldera y nunca hacia la calle. Es decir, una inclinación leve evitando que sea horizontal y que suele estar entre el 1% al 5% en función de la marca.
De forma genérica, es aconsejable que la pendiente sea, al menos, de un 3% (5,5 cm/m) a lo largo del recorrido de la salida de humos y evitar así tramos horizontales que puedan provocar una acumulación de condensados.
La inclinación impide que estos gases salgan por la salida de humos y que se mantengan en la parte inferior por obra de la gravedad, de forma que se expulsen por el desagüe (que es obligatorio instalar para las calderas de condensación).
¿Qué tipos de salidas de humos para calderas de condensación existen?
Podemos encontrar hasta 3 formas posibles de salida de vapor de agua en función de las características de la vivienda. Son la horizontal coaxial, la vertical coaxial y la de doble tubo.
Salida de humos horizontal coaxial
Es el conducto más común y incluye siempre en la caldera de condensación. Su instalación se realiza de forma horizontal a la caldera para salir por la fachada de la casa.
En las calderas de condensación se usan tubos compuestos de polipropileno que, al contrario que sus antecesoras de metal, suportan el calor de las actuales calderas y no se oxidan. Su diámetro exterior es de 10 cm y posee otro en su interior de 6 cm que es el encargado de expulsar el humo.
Salida de humos vertical coaxial
Este tipo de salida está indicada cuando la salida horizontal no es posible y se produce una instalación vertical a la vivienda para que salga por el tejado.
Las calderas de condensación no necesitan una conexión para recoger condensados al estar el vertical, puesto que están preparadas para evacuar por el desagüe. Como el caso anterior, los tubos son de polipropileno ya que los humos no alcanzan las elevadas temperaturas de antes cuando sí eran de metal y se oxidaban.
El diámetro exterior es de 10 cm y 6cm en el tubo interior encargado de evacuar el humo.
Salida de humos con doble tubo
Es modelo menos frecuente, pensado en los casos en que la salida de humos al exterior queda lejos y se necesita más metros para llegar.
Normalmente, los coaxiales tienen un máximo de 8 m en total, por lo que, en caso de necesitar más de esa distancia, hay que instalar el tipo de doble tubo.
En total, se requieren 2 tubos de polipropileno de entre 8 a 20 metros máximos que permiten ese tipo de instalación, ambos de 8 cm de diámetro. Como en los coaxiales, no necesitan de recogida de condensados puesto que la caldera está preparada para eso.
¿Salida de humos horizontal o vertical?
En relación a la salida coaxial de una caldera de condensación que hayamos conseguido, la expulsión de los humos se puede realizar de forma vertical u horizontal, recomendando siempre que se escoja en función de las facilidades que dé la casa, ya sean chimeneas o algún otro tipo de salida de humo. De esta forma, se pueden aprovechar al máximo al colocar la salida de humos en forma vertical.
Hay que tener en cuenta que las salidas de gases instaladas de forma horizontal requieren de una inclinación en relación al suelo para proteger la caldera de la entrada de agua durante la lluvia o de introducción de basura que pueda producir un mal funcionamiento o fallo en el equipo.
Cuando instalamos la caldera también podemos escoger realizar una salida con doble flujo. Es un sistema parecido a las coaxiales, pero en este caso, se invierte más en conseguir la salida y entrada de la caldera.
En conclusión, todas las calderas necesitan de una salida de humos para funcionar de forma eficiente, por lo que esta parte del dispositivo es fundamental que esté bien instalada. En caso de que los conductos se instalen de forma horizontal hacia el exterior, este ha de tener una inclinación del tubo de la caldera para evitar que la lluvia o algún tipo de suciedad pueda acceder a la caldera y estropearla. Así como que el líquido salga por el conducto, siendo algo que está prohibido y que puede provocar problemas al caer a la calle.