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Cuando llega el frío en los meses de invierno, nuestra calefacción se convierte en nuestro mejor aliado para soportar las bajas temperaturas en el hogar. Pero es posible que, de pronto, nos demos cuenta que la caldera funciona, pero los radiadores no calientan nada o solo una parte.

Si la calefacción no funciona bien, entonces de poco sirve tenerla. Si el radiador o radiadores están averiados y no sabemos por qué no producen calor, es mejor repararlos o, bien, contactar con un técnico para que localice la avería y pueda arreglarla.

manos sobre radiador

Sin duda, con un radiador estropeado, se reduce la comodidad y el confort durante el invierno. Además, en nuestro consumo se seguirá reflejando el uso de una energía que realmente no estamos disfrutando y, por eso, reparar el sistema de calefacción o un radiador se vuelve una necesidad.

En este post te vamos a indicar algunos motivos de porqué no funcionan los radiadores y cómo limpiar un radiador para mantenerlo en óptimas condiciones y no nos dé un susto al estropearse.

Solución 1: Revisa los termostatos

El problema puede ser debido a algo tan básico como que un termostato esté apagado. Es decir, si el termostato está configurado para una temperatura más baja, la calefacción no se activará hasta que la temperatura ambiente no sea inferior a la temperatura a la que ajustamos el termostato. Para valorar si este es el problema, giramos el termostato al su máximo nivel y comprobamos si la temperatura aumenta en todo el sistema de calefacción.

Solución 2: Revisa el cronotermostato

Un cronotermostato es muy parecido a un termostato, salvo por la peculiaridad de que la calefacción puede ser programada y configurada a nuestro gusto.

La calefacción general solo se activa en el momento en que se haya programado y muchas personas creen que las calderas no se activan en días que se produce el cambio de hora, aunque esto es debido a que el temporizador no se ha ajustado de forma automática al horario de verano.

Igualmente, el cronotermostato también se puede reiniciar en caso de que la caldera pierda energía (corte de energía eléctrica) o se agoten las pilas del aparato, así como que pueda estar estropeado y sea necesario tener que sustituirlo por otro.

gato sobre radiador

Solución 3: Purgar el radiador

Este problema es bastante común y, normalmente, es debido a un bloqueo en el paso del agua caliente ya que los radiadores de casa, por norma general, se calientan gracias al uso de agua caliente que pasa por sus circuitos. Por lo que el bloqueo debido a aire en un tramo de la instalación o del radiador puede hacer que estos dejen de calentar.

La solución en este caso es purgar el radiador, permitiendo que la masa de aire acumulada dentro del radiador salga al exterior y de nuevo el agua pueda circular y calentar el radiador nuevamente.

Para hacerlo, es necesario tener el sistema de calefacción apagado y la llave de paso de agua al radiador cerrada. Tras esto, solo es necesario girar la válvula de purgado que poseen todos los radiadores en su parte superior y mantenerlo así hasta que comience a salir agua. Esto indica que todo el aire ya ha salido de dentro del radiador.

En caso de ser una instalación individual, observaremos que la presión de la caldera ha bajado, por lo que tendremos que volver a regularla.

Solución 4: Llaves termostáticas sin uso

Si el problema no se debe a un radiador que no calienta bien, sino que no calienta absolutamente nada, la solución está en las llaves termostáticas. Estos aparatos se colocan en la parte superior del radiador y permite regular los grados de temperatura de cada uno de los radiadores.

Cuando esta llave lleva mucho tiempo sin usarse, es posible que se quede bloqueada en el momento en que pongamos en uso el radiador y este no caliente. La solución es retirar el aparato del radiador y mover el pistón varias veces hasta que consigamos que el radiador comience a calentar.

llave termostática

Limpiar un radiador sucio

Es posible que el sistema del radiador también dé problemas si está lleno de suciedad. Por eso, aquí señalaremos los pasos para eliminar de forma manual la suciedad de estos aparatos.

No tendremos problema alguno en hacerlo si nos gusta realizar tareas de bricolaje y queremos probar antes de recurrir a un técnico. Para realizar este proceso, necesitaremos las siguientes herramientas:

  • Llave purgadora.
  • Cubo o cuenco.
  • Una toalla y trapos viejos.
  • Dos llaves inglesas.
  • Una manguera para regar.
  • Un ayudante para levantar y mover el radiador.

Pasos a seguir:

  • Apagamos el sistema de calefacción y dejamos que se enfríe. Nos aseguramos de se hayan enfriado los radiadores antes de llevar a cabo cualquier tipo de tarea sobre ellos para evitar quemaduras.
  • Tras dejar que el sistema se enfríe, colocamos una toalla o trapo bajo el radiador y lo retiramos con cuidado de la pared. Para hacer este esfuerzo de levantar el aparato, necesitamos a otra persona que nos ayude.
  • Eso sí, ten cuidado de que el agua no se vierta en este momento para evitar que se pueda manchar el suelo o la pared.
  • Vertemos el contenido del radiador en un cubo o recipiente. Es bastante probable que el agua que salga del radiador posea un color oscuro debido a la acumulación de suciedad.
  • Lo sacamos al exterior (siempre que podamos hacerlo y enjuagamos el interior el radiador por ambos lados con una manguera de jardín.
  • Haciendo esto ten en cuenta que, si no es solo un radiador o más de uno y el problema con la calefacción persiste, es mejor contar con un fontanero que usará un sistema de inhibidor de corrosión al sistema de calefacción.
  • Una vez enjuagado el radiador, lo volvemos a colocar sobre la pared y volvemos a activar el sistema abriendo la llave de paso de entrada a la caldera.
  • Es posible que exista una llave de paso de entrada de agua externa o, bien, que la llave de paso sea interna. Si no estás seguro del tipo de llave, es mejor ponerse en contacto con un especialista.

hombre arreglando un radiador

Y, hasta aquí, todas las soluciones y acciones que puedes llevar a cabo en caso de que tu radiador o radiadores no calienten a pesar de que la caldera funcione de manera correcta. Recuerda, ante la duda es mejor contar con un profesional, aunque los consejos aquí llevados a cabo son bastante sencillos.

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